La primera sensación que produce abrir un blog —que se nutrirá de temas relacionados con la literatura y el mundo de las incorrecciones y particularidades del lenguaje y de otras cuestiones referentes a la escritura y a la publicación y reseña de libros— es la necesidad de la prudencia y la del juicio ponderado.
Pero somos profesionales y no vamos a dejar aparte escribir sobre cuestiones que deben tenerse en cuenta. Sabemos que muchos de nuestros errores en el lenguaje escrito sobre todo proceden de nuestra desidia, de nuestra falta de curiosidad intelectual para buscar en los diccionarios una determinada palabra o expresión.
De ahora en adelante iremos incorporando —mediante recopilación de “incorrecciones del lenguaje escrito”— notas de los desbarros más frecuentes que sirvan de consulta. Es tentador para quien se quiera asomar al mundo del lenguaje hacerlo con agudeza crítica, a la caza de la palabra exacta, rebuscada a veces, pero siempre al acecho de la más certera y ceñida expresión. La barra, sin embargo, es libre y cada cual es dueño de pedir lo que quiera. La selección es lo importante. El gusto final te lo dirán los lectores, que de eso sí saben, aunque ha de primar siempre el gustazo de dar con el lenguaje comprensible. En el lenguaje escrito, la comprensión lo es todo. Estas notas abren anchas perspectivas metodológicas y léxicas, con una finalidad de dar con las formas correctas, deshacer tópicos y brindar caminos de trabajo a los escritores apasionados por la escritura.
A modo de ejemplo traemos hoy:
IncorreccionesSe dice o se escribe: |
Forma correctaDebe decirse o escribirse: |
|
|
Tremendo disparate. Decir personas de ambos sexos es llamar a esas personas hermafroditas, seres que poseen ambos sexos.
Esperamos que esta clase de entradas sea interesante y, sobre todo, provechosa.
Una sociedad que no escribe correctamente, que no habla con orden, que no ama su lengua, se convierte en una sociedad que piensa poco y que terminará sintiéndose inferior. Y eso no solo afectará a sus empresas, a sus organismos estatales, a su cultura… También a cada persona individualmente. Y la sociedad de hoy hace ya tan poca gimnasia que no tenemos el músculo entrenado ni para mejorar la escritura ni para leer con mayor placer.
Defensa apasionada de la lengua española, Álex Grijelmo.